miércoles, 18 de febrero de 2015

El que no abre la cabeza, no le crece el corazón.

Creo firmemente en que a veces hay que salir de la burbuja, que no hay que quedarse sentado mientras pasa la vida misma y que siempre hay que ir en busca de la verdad, en ser un explorador y conocer esa historia. La curiosidad, las constantes preguntas que nos hacemos, los replanteos y el saber que no todo es lo que parece es lo que se debería hacer caso. Desde hace infinitos años, se sabe que la sociedad no puede regularse por sí misma, que es totalmente necesario que exista un estado que controle y procure el bien común para la sociedad y para la nación misma. La pregunta es: 
¿ Hasta dónde llega el poder en las personas?. Cada estado con su gobierno respectivo se encarga de manera precisa de que los ideales alcancen a la población, que cada integrante debe ser leal a su patria y a su nación y que si no lo hace va en contra de la nación y de su historia propia. Ahora yo me pregunto: ¿ Es posible que esa tarea se realice por amor a la patria y no por amor al poder?. Hasta la sociedad misma nos impone esas diferencias, nos distingue entre lo bueno y lo malo, lo que está bien y lo que está mal. Vivimos categorizando a las personas por su color de piel, por su físico, por sus gustos, por sus ideologías políticas étc. Es numerosa la gente que ha luchado por los valores patrióticos pero también es visible y imposible olvidar toda esa gente que sólo por ser distinta hoy ya no está. Es increíble cómo el poder afecta a la persona y hasta puede hacerla obrar de manera distinta a lo que realmente piensa sólo por " amor a la patria". La libertad de pensamiento debe existir siempre, no se puede permitir que ninguna sociedad represente ningún tipo de dictadura. No se puede reprimir lo distinto ni atentar ni fomentar el terrorismo de estado sólo porque es diferente a nuestros ideales, a lo que la nación nos enseñó. Cada cultura tiene su historia y sí quizás haya actos de otras naciones imperdonables pero la pregunta ahora es: ¿Si fueras una persona sin poder cometerías los mismos daños, horrores contra aquellos considerados distintos?. Las diferencias no hacen a las persona, cada uno es como es, todos somos iguales lo único que cambia es la cultura, nuestra historia pero no por eso hay que reprimirla, siempre debe haber historias que contar y más de una versión. ¿Si todo fuera una misma historia la leerías una y otra vez?. Nos enseñan a odiar y a reprimir la "otredad" cuando en realidad todos somos parte de una historia sólo que no vemos que son páginas distintas y hasta quizás capítulos que nunca lleguemos a leer por ignorancia y por incapaces de comprender la verdadera historia.


martes, 24 de junio de 2014

Pensar, pensar y sólo pensar es lo único que hago. Pienso en estos 7 u 8 meses que pasaron aproximadamente desde la última vez que me puse a escribir. De alguna manera me ayuda a descargarme el escribir, es una forma de volcar todo sentimiento, cada pensamiento en un solo lugar. Siento que crecí mucho como persona, que aprendí determinadas cosas que eran fundamentales para cambiar todo tipo de pensamiento que tenga y vivir día a día las pruebas que me va poniendo la vida que lo único que quieren es demostrar todo coraje, valentía, fortaleza que pueda llegar a tener y que todo el tiempo a lo largo de la vida va a estar desarrollándose en cada momento que me otorgue el porvenir que me espera. Ya no me pregunto el por qué de las cosas, ahora entiendo de una vez el porque sí no necesito ningún as quiero que las cosas pasen como tengan que pasar, que las situaciones se den de la forma que tenga que ser.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Uno nunca sabe dónde puede terminar, cómo, cuándo ni porqué y eso es lo interesante de la vida el vivir sin tener todas las respuestas pues si uno supiera todo ¿qué sentido tendría esa historia?. A lo largo de los días uno va transitando ciertas etapas por las cuales van a quedar marcados por siempre, quizás algunos son cambios bruscos pero de eso se trata de esas pruebas que nos va poniendo la vida para aprender lecciones, para ser mas fuertes y por sobre todas las cosas tener esas ganas de seguir luchando, de no bajar los brazos pese a cualquier adversidad que pueda existir. Muchas veces tratamos de entender cuáles son las razones de esos desafíos que se van presentando a lo largo de nuestro camino pero también hay ocasiones que sólo queda aceptar y que tal vez en otro tiempo, en otro lugar puedas sentir que tenías que pasarlo para que se pueda dar el porvenir. Por mas que sea injusto, por mas que la vida de mil vueltas y los cambios sean constantes, la vida es el mayor regalo que uno puede tener además de esos amores incondicionales que se cuentan con los dedos de una mano y que nunca nos van a dejar caer. Nunca pero nunca se debe dejar de intentar por mas que no sepamos en qué creer o no tengamos ánimo ni confianza siempre va a haber razones que nos van a hacer luchar, que nos van a hacer que derribemos esos muros que nos impiden tanta felicidad y sólo generan lágrimas y dolor, mucho dolor. Hay que ser un vencedor, hay que tener en cuenta que todo tiene su motivo aunque a lo mejor no se presente de una buena manera a la larga o a la corta las buenas vienen y en las malas están aquellos que valen la pena. Es fácil estar en las buenas pero si uno se pone a pensar un minuto: de todos aquellos que estuvieron en mis mejores momentos ¿Cuántos están en los que peor me siento?. No va a dejar de sorprendernos lo que nos depara el futuro y cómo vamos llevando nuestro presente y a pesar de tantas injusticias, de tanta maldad, de todas esas situaciones que merecen lo mejor también hay infinita felicidad, tantas sonrisas por sacar y existen esos pequeños momentos que son más que gratos para uno. Ni el mundo ni la vida es perfecta si lo fuera carecería totalmente de esas ganas de vivir, uno de alguna u otra forma necesita los problemas para ser mas fuerte, necesita pasar lo peor para luego al fin poder ser feliz y con las lecciones de cada día aprende y el aprender es un arte que no tiene fin.

Nos pueden derribar los muros y traspasar el alma, podemos sufrir huracanes, tormentas lo que sea pero lo que venga JUNTAS como siempre supimos hacerlo. Te vamos a sostener infinitamente la mano eso es una promesa que va a estar guardada por siempre. Fuerza, mucha fuerza y a creer en la fe que no todo está perdido.

martes, 26 de noviembre de 2013

A veces me pregunto hasta dónde uno puede llegar por amor y cuáles son las razones. Creo firmemente en que a veces no se trata de entender a la otra persona si no de aceptarla tal como es con sus virtudes y con sus defectos. Siempre quise un amor como el de las novelas o las típicas películas que hacían que el amor parezca perfecto por donde se lo viera cuando no estábamos sintiendo sus dos caras: la buena y la mala. No niego que alguna que otra vez juré no volver a caer en el amor pero al fin y al cabo ¿ Quién puede vivir sin amor? Yo al menos no puedo ni hacerme la fría ante semejante debilidad como puede ser algo tan simple como una sonrisa. Comprendí que no cualquiera iba a ganar su amor que por algo yo no era como las demás y él era tan diferente a todos los que llamé amor mío a ninguno se le parecía. Y así entendí porqué no funcionó con otras personas, porqué nadie mas que él pudo ganar ese amor que yo tanto oculté por tanto tiempo por miedo a equivocarme, a que me lastimen no quería volver a sufrir ni volver a creer. Fue ese amor que tanto anhelé como el de aquellas películas que me quedaba embelesada pensando en dónde iba a estar ese "príncipe" que todas alguna vez soñaron y quisieron. No niego que fui, soy y sigo siendo feliz de haberlo encontrado pero también aprendí mucho, aprendí a quererlo como es, aprendí a darle tiempo a las cosas por mas que me cueste y por sobre todo aprendí a amar. El amor te hace sentir fuerte a tal punto que todo es posible pero al mismo tiempo podes llegar a caer en picada lo importante es recordar qué te llevó a luchar y no darse por vencida sin antes intentar por sobre todas las cosas. 



Fuiste, sos y siempre vas a ser el amor de mi vida te amo con todo mi corazón y así va a seguir siendo.

domingo, 11 de agosto de 2013

A lo largo de la vida uno va transitando experiencias buenas y malas no importa que número de cada una de ellas sea mayor pues al fin y al cabo uno las vive. Dicen que aquello que se considera bueno queda en la mente como un recuerdo y lo definido como malo se tilda de experiencia. Pero ¿ Hasta que punto sabes que es bueno y que es malo? Porque no todo lo bueno es lo suficientemente bueno y no todo lo malo tiene razón de ser así. Y entonces ¿ Qué queda como recuerdo y que no? ¿ Qué cosas guarda la mente y que otras quedan en el olvido?. ¿ Existirá el olvido sólo por restar importancia o se trata de un olvido "forzoso"? , yo personalmente creo que recordamos no por lo mas fundamental si no por lo que dejó huellas en nuestra vida y por sobre todo en nosotros. Todos tenemos ciertas situaciones que no nos gusta recordar pero que en su momento sirvieron y ese es el punto, nos acordamos de las huellas que dejaron aunque no las recordemos en todo preciso instante nos marcaron y eso queda permanente como si fuera un tatuaje hecho en la piel. Uno puede borrarlo, puede quizás no recordarlo pero que estuvo presente en nosotros eso no se quita tan fácilmente. Por eso es que el olvido no existe, es solo una fantasía de que pueden llegar a estar fuera de nuestra vida recuerdos que no quisiéramos que existan ¿ Pero cómo evitar su existencia?, ¿ Cómo hacer para anular que alguna vez estuvo? Es prácticamente imposible porque existió, existe y va a seguir existiendo por el resto de nuestras vidas por mas intento forzoso que realicemos para olvidar. Las marcas, las cicatrices son características que podemos no verlas, no sentirlas pero aparecen al nombrarlas, al pensarlas y no carecen de existencia. No necesariamente se debe olvidar a veces un recuerdo puede cambiar parcial o totalmente el pensamiento de alguien y por lo tanto su vida misma como la de otros.

lunes, 20 de mayo de 2013


Dicen que uno para superar los miedos debe enfrentarlos uno por uno y demostrar que sí se puede. El miedo a veces te juega en contra, puede convertirse en una ceguera que impide que puedas intentarlo más allá de todo, puede hacerte perder lo que menos pensabas, puede maquinarte la cabeza mil veces con el mismo pensamiento que hace que cada vez menos creas en que vas a poder lograrlo. Pero si uno lo ve desde otro lado, el miedo sirve para que uno desee aún más aquello que cree que no puede hacer. Y es eso como también el encontrar una motivación para ponernos firmes y tomar valor lo que  hace que el "querer hacer algo" se transforme en un "poder hacer algo" sin importar nada y que el simple hecho de quizás fracasar en esto no nos haga retroceder varios pasos atrás porque después de todo no hay nada peor que quedarse con la duda de ¿Qué hubiera pasado si.. 
Todo es aprendizaje, cada experiencia nos deja algo y depende de nosotros el aprender esas lecciones que nos deja la vida las cuales tarde o temprano las asumimos con valor pero también con miedo y sin embargo no nos damos cuenta que todo nos hace crecer como personas y que la vida es corta hay que vivirla a pleno y aprovecharla lo más posible. Siempre queda una vuelta de tuerca más, una nueva oportunidad de comenzar de nuevo a prueba y error pero sin dejar de lado aquella valentía que nos caracteriza y nos hace seguir adelante.

jueves, 16 de mayo de 2013